Reflexiones

HACIA UNA REFLEXIÓN DE MI PRÁCTICA DOCENTE

Es un hecho que el escenario global ha sufrido transformaciones radicales y el uso de la tecnología está logrando que esos cambios sean cada vez más acelerados. Por lo tanto, mi pensamiento también tiene que sufrir modificaciones porque el hecho de no ser consciente de las dimensiones de la evolución social, repercute negativamente en mi forma de realizar mi práctica docente.

Al realizar mi autoevaluación, me queda muy claro que estoy siempre en un proceso de transformación y que es fundamental seguirme preparando para hacer frente a los nuevos retos que me imponen las generaciones actuales.

Considero que en las muestras que he presentado hubo algunos aciertos que permitieron que los estudiantes consolidaran de manera general los aprendizajes esperados. Sin embargo, es fundamental buscar otras fuentes de información que permitan enriquecer las aportaciones y actualizar los temas según los intereses de los estudiantes.

Una de mis fortalezas es que reflexiono de manera constante, monitoreo mi propia práctica y estoy en un proceso de formación continua.

Tengo algunas dificultades debido al contexto en el que desarrollo mi labor, como es el hecho de que la infraestructura no es apropiada para los estudiantes con necesidades especiales y el trasladarlos a otras áreas que enriquecerían más las estrategias de enseñanza se torna complicado. Por otro lado, hacen falta equipos de cómputo y acceso a Internet para que los recursos sean más apropiados para las presentes generaciones.

Estoy consciente que aún debo trabajar en mis debilidades, como son: los procesos de inclusión para involucrar de una mejor manera a los alumnos con necesidades educativas especiales, que debo seguir fortaleciendo el diseño de mis instrumentos de evaluación y que debo continuar gestionando recursos para que mis estudiantes accedan a las innovaciones tecnológicas. 

Sin embargo, sin faltar a la modestia reconozco que mi práctica docente mejora cada ciclo escolar y a pesar de que los estudiantes tienen características diferentes y que cada vez los retos son mayores porque existe apatía, desmotivación y desapego familiar entre otros factores, he logrado vencer bastantes obstáculos para sacarlos adelante y obtener buenos resultados. Las áreas en las que he mejorado han sido las estrategias de enseñanza, los ambientes de aprendizaje, la evaluación, la socialización y el uso de recursos atractivos.

Un aspecto fundamental que ha prevalecido en mi práctica es mi ética profesional, ya que no he sido corrompida por prácticas negativas que me hagan desatender mi praxis. Procuro ser un buen ejemplo a seguir para mis alumnos, promuevo valores, tengo altas expectativas para con ellos, los respeto y cuido su integridad.

El pensamiento crítico y complejo se va conformando paulatinamente conforme avanzo en mi proceso académico y lo llevo a la práctica. Las situaciones que vivo cotidianamente en mi centro de trabajo se complementan con las innovaciones educativas que surgen constantemente. Por lo tanto, la mejor vía para no perder de vista esas interacciones tan necesarias es la búsqueda constante de información que me lleve a estar actualizada respecto a los requerimientos de la sociedad actual, ya que con la revolución que se está dando en nuestros tiempos, lo de hoy ya quedará obsoleto mañana.

Me parece que el tener presente nuestra pertenencia al cosmos es la vía principal para encaminar nuestras acciones hacia el restablecimiento de relaciones entre los seres humanos, porque independientemente de nuestras diferencias, pertenecemos a un todo que está por encima de cada uno de nosotros. Si logramos comprender así las cosas e identificar los procesos que conducen al cambio, es posible proyectar de sujeto a sujeto ese tipo de pensamiento renovador.

La reflexión constante nos ayudará a darnos cuenta de cuáles son nuestras áreas de oportunidad y nos dará la pauta para lograr formar seres auténticos, autónomos y capaces de resolver las situaciones que se les presentan.

Los invito a seguir adelante en el camino que han elegido, que la pasión por la enseñanza y por el propio aprendizaje los sigan motivando a continuar haciendo frente a las adversidades porque finalmente, son esos seres en proceso de formación quienes merecen una educación de calidad.